Pfizer invertirá 20 millones en su planta estrella contra la hemofilia

 

La planta, que exporta el 97 por ciento de su producción, factura unos 1.300 millones de euros en medicamentos para la hemofilia

Pfizer refuerza su lucha contra la hemofilia. A través de una inversión de 20 millones de euros, la compañía farmacéutica prevé dar un impulso a su planta de biotecnología en Madrid,  según ha indicado el director del centro, Xavier Velasco, a Redacción Médica. La misma planta que produce cerca de dos millones de medicinas anuales, utilizadas en el tratamiento contra la hemofilia, enfermedad que afecta a más de tres millones de españoles y 30 millones de personas en todo el mundo.

Los recursos serán implementados en una nueva línea de empaquetamiento, que estará lista para el próximo año, permitiendo que las medicinas para los distintos tratamientos cuenten con una presentación diferencial, al mismo tiempo que se pasará de un soporte de plástico en los kits a uno de cartón. Otro porcentaje se utilizará para la adquisición de un nuevo liofilizador, equipo que permite la eliminación del agua en las disoluciones médicas en condiciones de baja presión y temperatura. Un equipo de precisión que, para garantizar su continuo funcionamiento, está conectado a un sistema de alarma y de avisos a los móviles del equipo responsable.

La planta de biotecnología de Pfizer en Madrid ha facturado, en tratamientos contra la hemofilia, “1.300 millones de euros durante 2014, una cantidad que prevemos mantener en el presente ejercicio”, apunta Velasco. Este ha sido el resultado de una apuesta firme de Pfizer, ya que durante los últimos 15 años ha destinado una inversión total de 100 millones de euros a este centro dotado con 232 profesionales, permitiéndole que, en 2013, la propia empresa farmacéutica le otorgase ‘el premio a la mejor planta Pfizer’.

Los recursos implementados han permitido que la planta de biotecnología sea una de las primeras en el mundo en proporcionar un tratamiento individualizado, un éxito que ha logrado por medio de la administración de una terapia personalizada. “A través de la individualización del tratamiento se consigue una mayor adherencia terapéutica y una mejora en la eficiencia del tratamiento, con el consiguiente descenso de las complicaciones hemorrágicas”, ha precisado Víctor Jiménez-Yuste, jefe del servicio de Hematología del Hospital Universitario La Paz.

El director médico de Pfizer, Juan Álvarez, ha precisado que la farmacéutica tiene como objetivo “mejorar la calidad de vida de estos pacientes [de hemofilia] mediante el fomento de la innovación médica y el desarrollo de herramientas que ayuden a los profesionales sanitarios”. No obstante, no sólo a los de España, sino aquellos en los más de 60 países a los que distribuye la planta madrileña y que alcanzan a 15.000 pacientes, un listado que estiman aumente en los próximos dos años, con la entrada en Turquía, Kazajistán y Egipto, sin descartar otros países como Irak, Irán, Argentina, Brasil, Taiwán o Corea.