La farmacéutica estadounidense Merck comunicó ayer oficialmente que compra a su rival Cubist Pharmaceuticals por 8.400 millones de dólares (6.800 millones de euros) más la deuda, lo que sumaría un monto total de 9.500 millones de dólares (7.740 millones de euros).
Esta compra le otorga a la farmacéutica una entrada al mercado de antibióticos especializados en bacterias hiperresistentes.
La compañía estadounidense pagará 102 dólares por cada acción de Cubist, lo que representa una prima para sus accionistas del 37% respecto del cierre de cotización de Cubist el pasado viernes, a 74,36 dólares por acción. El acuerdo supone asumir 1.100 millones de dólares (890 millones de euros) de deuda. Esta compra de Merck es la segunda de esta magnitud que realiza la empresa en el año. La farmacéutica también ha adquirido a Idenix Pharmaceuticals por 3.850 millones de dólares el pasado mes de junio para impulsar su cartera de producto en tratamientos de la hepatitis C.
Merck y su rival británico AstraZeneca han orientado su negocio hacia estos medicamentos, que atacan a bacterias resistentes a otros fármacos antibióticos conocidos, después de que un informe de 2013 del Centro de Control y Prevención de EEUU estimara que que más de dos millones de personas en EEUU enferman cada año con este tipo de virus e infecciones, con más de 23.000 muertes anuales por su causa.
Merck comunicó el lunes que el acuerdo, que le da acceso al antibiótico Cubicin, aportará en torno a los 1.000 millones de dólares (814 millones de euros) a los ingresos de la compañía para el año que viene. Las fuertes ventas de este fármaco han incrementado los ingresos de Cubist en un 16% sólo en el tercer trimestre.
Además, la farmacéutica tiene en desarrollo otro fármaco, denominado Ceftolozane/Tazobactam, sobre el que hay grandes expectativas de que consiga la aprobación de la FDA (el organismo encargado de velar por la eficacia y seguridad de los fármacos en EEUU)para su comercialización en el país antes de que acabe el año como tratamiento de las infecciones severas de orina.
“Cubist es un líder global en antibióticos que ha generado una cartera de productos fuerte en medicamentos tanto comercializados como moléculas en último estadio de desarrollo”, aseguró el consejero delegado de Merck, Kenneth Frazier, en un comunicado. “La combinación de esta amplia experiencia con las fortalezas comerciales y el alcance global de Merck nos permitirá generar una posición fuerte y mejorar el cuidado en hospitales mientras investigamos y trabajamos sobre áreas que no están suficientemente investigadas, como la resistencia a los antibióticos de determinadas bacterias”, explicaban.
La farmacéutica se refiere a mejorar el cuidado en los hospitales como una prioridad en este área porque está estudiado que son un caldo de cultivo idóneo para estas infecciones muy resistentes a tratamiento, como la neumonía bacteriana. Muchos laboratorios han recortado, sin embargo, sus investigaciones en este área porque los antibióticos son fármacos baratos normalmente y se usan durante cortos espacios de tiempo, lo que disminuye su rentabilidad. Esto ha dejado el campo abierto a especialistas como Cubist, que invierte 400 millones al año en investigación de antibióticos.